Impactante campaña contra el bipartidismo
vota PPPSOE si te atreves
Ahora que llegan las elecciones, el PSOE nos pide el voto de nuevo. Hablan de políticas sociales y de los recortes del otro, como si los suyos no nos hubieran afectado o no hubieran allanado el camino de los hachazos posteriores. Los mismos que estaban en el gobierno de entonces nos hablan como si no tuviéramos memoria, como si no recordáramos que ellos también hicieron cosas en contra de su propio programa. Nos tratan como si fuéramos unos niños a los que es posible engañar una y otra vez y que, en el fondo, terminarán perdonando las “jugarretas” de un padre protector que sabe lo que es mejor para nosotros. “Te lo juro: esta vez será todo diferente.” Pero nunca lo es.
Ahora llegan las elecciones y el Partido Popular nos pide el voto de nuevo. Hablan de recuperación económica, como si ya no hubiera 6 millones de parados. Hablan del fin de la crisis, cuando un cuarto de la población vive bajo el umbral de la pobreza. Los mismos que están en el gobierno que no sólo no ha detenido los desahucios, que ha quitado la universalidad de la sanidad, o desmantelado la educación pública, esos mismos ahora nos piden una nueva oportunidad para seguir en la senda de los recortes sociales y la pérdida de derechos que ya han hundido a otros países del sur. Nos piden, en suma, que cavemos nuestra propia tumba, que pongamos una pistola en nuestra sien y apretemos el gatillo.
Llevan 32 años dándonos a elegir entre una derecha progresista y una derecha retrógrada, las dos caras de una misma moneda. Con el PPSOE como máximo exponente de las políticas neoliberales que gobiernan el mundo, rindiendo pleitesía a los mercados y a sus intereses, el bipartidismo es el guardián de un sistema profundamente injusto. Creemos, por tanto, que votar bipartidismo es continuar perpetuando en el tiempo ese sistema injusto.
Hacer durante 32 años lo mismo esperando obtener un resultado diferente es una locura. Para estas elecciones hay 39 listas distintas entre las que elegir. Incluso se puede elegir no participar, si es por convicción y no por simple vaguería. Pero no se trata de elegir por elegir. Como ciudadanos tenemos que ser críticos con las personas en las que delegamos la responsabilidad de gobernarnos. No se trata de votar y olvidarse: hay que estar encima.
En nuestra mano está que las cosas cambien. Sí se puede.
por DRY-CR en http://www.democraciarealya.es/